Sala de Arte Contemporáneo SAC
Del 10 de julio al 31 de agosto de 2025
Exposición
‘Habitar la salina’ se compone de una serie de obras pictóricas que versan sobre los paisajes de Salinas. En ellas se reflexiona en torno a su belleza y singularidad, dadas por el carácter plástico y capacidad inspiradora inherentes a esta forma de paisaje, fruto de sus variaciones cromáticas y su distribución geométrica. Conceptualmente, atraviesan también el proyecto las ideas de “paisaje cultural”, “territorio” y su antropización sostenible, ya que las Salinas no se imponen al medio, sino que se adaptan a este física y funcionalmente.
Cabe decir, además, que dichos enclaves, considerándose la serie de aspectos patrimoniales materiales e inmateriales que recogen, se constituyen como un elemento de peso simbólico e identitario; y que el tema recorre también lo autobiográfico, teniendo en cuenta lo común de estos paisajes en Canarias, el lugar de origen de la autora, y además donde se realizara la exposición.
Es por todo ello por lo que las obras que conforman este proyecto constituyen una investigación pictórica sobre estos paisajes, dividida en tres grandes partes.
La primera etapa, de carácter inicial, se compone de una serie de obras caracterizadas por una pulsión figurativa marcada, que tratan de inclinarse hacia lo abstracto mediante la reinterpretación fragmentaria del motivo como guiño y reiteración a los enclaves salineros, de por sí fragmentados. Formalmente, destaca su gama cromática, armónica y en tonos quebrados, que contribuye a generar una cierta sensación atmosférica en las pinturas. Técnicamente, se emplean recursos como las reservas y la generación de texturas mediante esgrafiados.
En la segunda etapa, la obra se aproxima aún más a la abstracción. Se intensifica la saturación cromática y se exploran juegos de perspectiva, reencuadres, superposiciones, diferentes registros de pinceladas y densidades matéricas. Con estos recursos —y mediante viajes de ida y vuelta entre lo macroscópico y lo microscópico del paisaje—, se alude a cuestiones como los procesos de sedimentación, el concepto de densidad o el paso del tiempo, propios de la producción de sal.
Por último, en la tercera etapa, se invita al espectador a “habitar la salina”, no de la misma manera que en los estadíos anteriores, que tienen más que ver con habitar el enclave salinero en su conjunto, sino a habitar la salina desde dentro, a “nadar” entre su rica vida microscópica, a observar la bacteria Dunaliella Salina y disfrutar de su cromatismo. Así, se desarrollan obras de gran formato que persiguen una experiencia inmersiva. Esta idea se plantea como un gesto cargado de lirismo y cierta paradoja física: Sumergirse en una salina resulta imposible, pero precisamente esa imposibilidad abre la puerta a una narrativa con encanto propio.
Artista
Patricia Santana (Gran Canaria, 1999) es ingeniera en Diseño Industrial y actualmente cursa Bellas Artes en la Universidad Politécnica de Valencia. Su trabajo pictórico ha sido premiado y reconocido en diferentes convocatorias y certámenes, como Gran Canaria Arte Joven (Cabildo de Gran Canaria), Art i Creativitat Jove (Ayuntamiento de Valencia) o Espacio CV (CAAM).
'Habitar la salina' es su segundo proyecto expositivo individual, tras 'Sumergirse', que exhibió en 2023-24 en espacios de Gran Canaria. Desde 2017 ha participado en numerosas colectivas en Canarias y Valencia.
Su statement:
Mi trabajo se desarrolla en el ámbito de la pintura, medio del que disfruto por lo que implica su proceso: un diálogo constante con la obra y una continua toma de decisiones, cierta tensión entre control e intuición, y, en ocasiones, el puente hacia un estado meditativo.
A nivel formal, me agrada especialmente el uso del color, la construcción de texturas a partir de capas sucesivas y la posibilidad de generar profundidad en una superficie bidimensional como es el lienzo.
Trabajo a partir de la observación de la naturaleza, con especial atención al paisaje de las Islas Canarias, mi lugar de origen. Las salinas constituyen hasta ahora el motivo más recurrente de mi práctica, tanto en su dimensión macroscópica como microscópica. Me interesan por su carácter plástico y capacidad inspiradora – dados por su geometrización y su riqueza cromática características -, pero también por su potencial simbólico. A través de la pintura, investigo formas de representar una relación íntima con el paisaje, la memoria visual, el origen y los elementos que construyen la identidad insular.
Concibo la pintura como una vía para compartir un doble disfrute: el del propio proceso creativo y el de la contemplación de la obra por parte del espectador, al que deseo ofrecer una experiencia estética agradable y envolvente. Para ello recurro al gran formato, buscando que la escala refuerce la sensación inmersiva de las pinturas, y a un lenguaje que transita entre la figuración y la abstracción y que persigue invitar a una pausa para atender las cualidades estéticas y matéricas que muestran los trabajos.